viernes, 9 de junio de 2017

Proyecto final, Retomar la Tierra


La idea de mi proyecto surgió y evolucionó a partir de mi experiencia como foráneo en medio de la gran ciudad. El haberme movido a una ciudad descontextualizó todo aquello a lo que estaba yo acostumbrado a ver y sentir en mi entorno.Y una de la cosas a las que más estoy habituado es al bosque, las plantas, no como un adorno que el hombre delimita y construye, sino a esa naturaliza salvaje, en su estado natural; por lo tanto mi visión de alguna manera aun exige, ya en la ciudad esta cualidad en mi paisaje diario.

Todo esto se transformó en la concepción de esta lucha por sobrevivir, la nostalgia de una idea de naturaliza en mi mente que intenta apoderarse de nuevo en los entornos a los que miro y donde el hombre ha dejado su huella. No estoy en desacuerdo con el avance del hombre y lo que construye a su paso, porque también formo parte de este. Pero desde mi muy particular “gusto”, me agrada esta imagen, la de un objeto o un espacio edificado por el hombre que regresa a formar parte del entorno natural o que está en vías de hacerlo; a partir de la fuerza de las plantas que se imponen, deforman y retoman el espacio que le pertenece de origen.

Por otro lado, mi método consistió en la búsqueda de estos espacios, dentro de la ciudad y también en otras ciudades, y Veracruz (el puerto), tenía lo que estaba buscando. De este modo también cumplía una de las imágenes que me agradan de "la idea del fotógrafo", como ente que se interna en lo desconocido, observa, y a partir de una caza exhaustiva colecciona momentos, para luego de un tiempo regresar con el motín, con las nuevas experiencias. Cabe mencionar (como dato extra y quizás insignificante para los fines del proyecto, dado que no lo pensé dentro de lo que proyectaría en mis imágenes pero que finamente forma parte del proceso), que para mí fue muy enriquecedor este ejercicio, dialogar con el entorno desconocido, introducirme a casas viejas sin permiso, conocer nuevas caras, nuevas formas de convivencia, observar bajo una luz nueva, sin prejuicios, ser capaz de observar detalles que uno pierde de vista  en la propia cotidianidad.